Es improbable elaborar un excelente vino sin un buen suelo. El terreno es un factor fundamental en su personalidad y a unos cinco metros bajo tierra se gesta su alma. A esa profundidad llegan las raíces de la vid, que se nutre en función de minerales, rocas, laderas, arcillas y microorganismos. El mejor suelo no debe ser ni salino ni ácido y sí tiene que ser pobre en materia orgánica, suelto y con buen drenaje. De lo contrario, las uvas crecerían demasiado y darían vinos acuosos e insípidos. Para aclarar cuáles son los principales suelos y sus características, en Vinoteca Mendibil hemos realizado esta relación.
Características: Aportan una maduración más rápida, necesita poca agua.
Vinos: Suaves y muy aromáticos, brillantes y poco alcohólicos, fáciles de beber.
Zonas: Valdeorras, Rias Baixas, Ribeiro, Ribeira Sacra, Méntrida y Vinos de Madrid.
Características: Muy compactos, presentan más capacidad para retener nutrientes y agua, sin oxígeno, donde las plantas sufren y buscan los caminos por donde se filtra el agua.
Vinos: Elegantes, con estructura y más color. Son más fríos, retrasan la maduración y, cuando no hay un exceso de agua, transmiten a los vinos más cuerpo y color.
Zonas: Rioja, Ribera del Duero, Calatayud, Alicante, Cigales, Somontano…
Características: Permiten una suave maduración.
Vinos: Armoniosos, francos, limpios, con aromas minerales, ligeros toques salinos y una buena acidez.
Zonas: Galicia, Méntrida, Madrid…
Características: Pobres y poco profundos, con poca materia orgánica. Terrenos calientes que acumulan calor para el frío nocturno y favorecen el grado alcohólico.
Vinos: Muy maduros, tánicos, minerales, complejos y poderosos.
Zonas: Priorat, Ribeira Sacra, La Axarquía, Tenerife, El Bierzo y Ampurdán, entre otros.
Características: Filtran muy bien el agua y retienen los rayos de sol.
Vinos: Mucho cuerpo, con aromas minerales y ahumados.
Zonas: Lanzarote, Hierro, Valle de Güimar, Gran Canaria, La Palma y Abona, entre otros.
Características: Baja materia orgánica, con un buen drenaje en superficie y con buena retención de agua al profundizar. Poseen gran capacidad hídrica, lo que permite a la viña subsistir en condiciones de sequía prolongada.
Vinos: Con cuerpo, buen contenido alcohólico, baja acidez y muy buena calidad.
Zonas: Jerez, Rioja Alavesa, Jumilla, Calatayud, Yecla, Cigales, Alicante y Somontano, entre otras.